La Osteopatía se define como la ciencia y el arte de diagnosticar y de tratar las disfunciones de movilidad de los tejidos del cuerpo humano, que provocan trastornos y perturban el estado de salud del organismo.
Su creador, Andrew Taylor Still (1828-1917), postuló las 5 leyes de la Osteopatía:

- La ESTRUCTURA gobierna la FUNCIÓN: si los tejidos mas profundos del organismo (sist. nervioso central, meninges y huesos) no están en su posición anatómicamente correcta los órganos y elementos conectados a ellos no funcionarán bien.
- La Ley de la Arteria es ABSOLUTA: al igual que en un huerto si la sangre (agua) no fluye correctamente nuestro huerto no podrá crecer correctamente.
- El cuerpo es una UNIDAD: el cuerpo es una unidad completa y compleja que no puede dividirse en partes separadas.
- El cuerpo tiene TODOS los RECURSOS (homeostasis): tiene anticuerpos, antibióticos, antinflamatorios y todo lo necesario para que podamos llevar una vida óptima. ¡Y se regula solo!
- La VIDA es MOVIMIENTO: o el movimiento es vida. Lo mismo da como lo expresemos porque la ausencia de movimiento es ausencia de vida.
El osteópata es una persona respetuosa y sensible, que escucha a quien acude a él, palpa con delicadeza y observa atentamente a las personas y a su entorno. Se comunica con fluidez, cuidando el lenguaje y usando palabras evocadoras que permitan a quien le consulta expresarse sin trabas, explicando lo que le sucede y sus emociones.

